Como no he tenido mucho tiempo para pensar en el artículo de hoy debido a los muchos compromisos familiares que he tenido estos días. - A los típicos de estos días ha habido que sumar la boda de mi hermano y el bautizo de mi nuevo sobrino.- Por esa razón no me voy a complicar mucho la existencia y para cumplir el tramite, y como estamos en fechas donde los niños son los protagonista quiero pediros que me contéis cual era vuestro juguete preferido. Ese que se ha grabado en vuestra memoria y con el que compartisteis los mejores años de vuestra vida. Ese que aún tenéis guardado en un altillo y que de vez en cuando sacáis para retroceder en el tiempo con la mente y pasear por el jardín de vuestra infancia y descubrir que aún no está marchito.
Volved a ser niños, y contádmelo!
Dani Badil
9 comentarios:
Una muñeca, la gordi, durmió conmigo durante miles de años, me acompañaba ahí donde fuera y sabe más secretos de mi que nadie. Ahora la tengo que llevar a que le den un retoque. Por todos pasan los años.
Joooooo!!!!!!!!!!! Yo no tengo de eso!!!! Yo soy de guardar y guardar, pero mi madre es de tirar y tirar, lo cual ha hecho que sólo queden unas muñecas que casi casi tenían tantos años como yo. Y al final tb me he tenido que deshacer de ellas pq en mi nueva casa desentonaban bastante. Así que no tengo recuerdos...QUÉ TRISTE!
Burbu, un cosido y un parche nos vienen bien a todos. Cuida bien de la gordi, no vaya a ser que se enfade contigo y cuente todos tus secretos.
Delcar, algún juguete trendrás en tu casa guardado, aunque sólo sea uno. Si no es así no te preocupes, con que te acuerdes de ellos ya es suficiente, no es necesario tenerlos fisicamente.
Yo era un autentico fan del Exin castillos, estaba horas y horas haciendo todo tipo de casas y fortalezas, hasta que consegui hacer un tejado de dos aguas estuve ratos de los ratos. Ahora lo desempolvo para jugar con mis primos pequeños y que se olviden un rato de los video juegos.
Sí señor escaromouche, yo jamás conseguí un tejado de doble vertiente que se mantuviese más de dos minutos.
Y que me dices de los geyperman. Pero los buenos, los primeros, esos que iban en pelotas debajo del uniforme. Que después sacaron otros que llevaba calzoncillo incorporado que eran peores. La de perrerías que les he podido hacer a los pobres desgraciados. Desde afeitarlos con cuchillas oxidadas, hasta ponerles petardos en las manos y pegarles tiros con la escopeta de perdigones. Y cuando sus débiles articulaciones de plástico se rompían y se les partían las piernas por la rodilla los operaba atravesándolos con un clavo al rojo vivo. Eso sí que eran héroes y no los blandengues de los actionman de ahora.
EStoy contigo, donde estén los geyperman que se quiten los "actioman". Creo que no había niño que no tuviera alguno sin amputaciones.
Yo tenía (y tengo) un oso de peluche, que era más bien un perro, y que se llama Peposo. Y una vaca que se llamaba Vaqueta... original, eh?
Pero yo, con lo que mejor me lo pasaba era jugando con el barro: ensuciándome, declarándole la guerra a mis vecinos, atacando a mi hermano a traición! Así me va de mayor, que me gusta el barro más que a un tonto un lápiz...
hola!Buf, a mí me encantaban (y me siguen gustando mucho) los peluches, en especial el osico Pico, compañero inseparable de los 4 a los 15 años (me lo dejé olvidado en un hotel) y el mono Tobías un peluche-marioneta que todavía conservo, tuerto y algo ajado, pero es que los años pasan por todos...
hola mis amores!!!hoy, ultimo dia del ano no podìa faltar en mi badil, glamouroso como es èl!!!! por Dios!!!!hoy, ademàs, os escribo desde Roma, si, queridos, hoy en lugar de uvas comerèe lentejas! en fin cosas de las culturas y tal, la verdad es que son màs fàciles de comer, por aquello de que no te atragantas pero claro, te ries menos!!! yo no soy supersticiosa pero dicen que da fortuna, ya os lo contarè de aquì a por lo menos un ano! jolin con las enyes!
Mi jueguete preferido era una muneca parecida a la repollo, algo asì como "pabis paskis" aùn la tengo!
Bueno, que feliz 2008 y mucha vida a nuestro blog
con muuuuuuuuuuuuuucho amor,
Mari
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