El glamour nace, se hace o se compra en el Super?


martes, 2 de junio de 2009

De hombres y mujeres

Últimamente el tema de los hombres y las mujeres irrumpe en mi vida (y en mi email) con gran fuerza. Será la primavera, digo yo. O que la política ya no levanta pasiones como antes.

Últimamente los O.R.N.I.S. oscenses y foráneos están desconocidos. Por educados. Por valientes. Por pícaros. Por…(y jamás pensé que llegaría el día en que diría semejante cosa) interesantes!

Últimamente he de confesar que mi vida personal está llena de posibilidades interesantes… y alguna interesada, claro. De esas nunca faltan. Pero yo, me dejo querer.
Y es que a veces la vida te da de comer más de lo que puedes masticar. Pero, ¿a quién le amarga un dulce?
Siempre resulta agradable tener con quién jugar al juego de las diferencias. Porque amigas (y amigos), hombres y mujeres somos distintos. Tanto, que a veces duele.

Últimamente la vida me trata bien y me enseña que no es necesario comprar voluntades cuando tienes tantas regaladas al alcance de la mano ¿Para qué ir siempre contracorriente? ¿Por qué creemos que es mejor lo que nos cuesta sangre, sudor y lágrimas que lo que se nos entrega dócilmente? La lucha puede ser más interesante, eso es cierto, pero lo que encuentras tras la conquista no tiene por qué ser amor. Y aunque lo fuera… ¿quién nos lo garantiza?
Nadie nos cuenta cómo sigue la película cuando al fin, uno de los protagonistas gana la guerra y conquista al rival. Después de tantas vicisitudes, de tanta lucha, de tanto esfuerzo… se produce el gran momento: El beso de película. Ohhhhhh… qué cuqui!
Pero y después, ¿qué? ¿Quién se cree ya eso de que fueron felices y comieron perdices?
La conquista, bien entendida, debería ser un juego, no una guerra. Y la diferencia es que en el juego ganan todos, pero en la guerra todos perdemos.

Últimamente me noto distinta. Será que soy distinta.
La Gata ha vuelto… ¿quién quiere jugar?

7 comentarios:

Dina dijo...

Nena, a mí me has dejado enganchada con lo de que últimamente los O.R.N.I.S. están desconocidos por... interesante... eeeeeeeeeeesto ¿interesantes interesantes?... ¿interesantes del bueno?... ¿porque no nos sacas de paseo contigo?...

Aprovecha esta buena racha... y luego nos lo cuentas.

Pequeña Silvi dijo...

A mí ya me parece bien... a veces nos empeñamos en pintar de azul al príncipe gris (sí, intertextualización sin escrúpulos de Sabina)y, como mucho, lo que conseguimos al final es tener un pitufo al lao!!

Pd: lo de los ornis interesantes lo tengo que ver con mis ojos...porque ni jarta de vino me lo creo!

La gata Lola dijo...

Dina, cari. Si tú ya tienes intereses interesantes. Que lo se de buena tinta.
Ahora, yo te saco de paseo cuando y donde quieras. Faltaría más. Además, así os cuento cómo van mis películas. Que ya sabes que lo que me mola ser la prota de elige tu propia aventura!

Peque, con lo maruja que tú eres, tú más que nadie debería de saber que hay príncipes azules y príncipes de "azulete". Y esos destiñen que no veas!
Además, he dicho interesantes. No guapos, que veo por dónde vas! Pero mientras no nos salga el pitufo maquinero Mari, a mi ya me parece bien!

J. Grau dijo...

Oye oye oye... a lo del marujeo y critiqueo yo me apunto!!!

Los cuentos siempre han dicho eso de los principes azules y que comieron perdices y fueron felices... ¿cuanto tiempo? la noche de bodas y punto no?? porque seguramente el principe de tanto montar a caballo deja la raya de nicotina en los gallumbos ¿y quien tiene que lavar eso? bueno, vale que puede que tengan chacha y en caso de ser así... el principe de monterías, de cacerías y de juerga borrachera con los otros colegas príncipes (no se puede ir con la plebe... ta claro) y ella que?? a rascarse el higo en casa? a tomar te y cafe con las amigas??

No os fieis nunca de los principes azules, que no existen, quedaros con el mejor de los ORNIS que por lo menos ya sabéis que son ranas y puede que os den alguna sorpresilla ;)

Gata me debes un post de hermandad... que lo sepasssssssss

Pequeña Silvi dijo...

Mari-gata, hasta los príncipes de azulete tienen su función...sí sí, esa de volver a lucirnos un poco el corazón, amarillento de tanto desinfectarlo en lejía...

La gata Lola dijo...

McGrau lo se y es mi próximo objetivo. Prometo hermanamiento glamouroso o morir en el intento!

Y qué razón tienes rey! Los príncipes azules son un timo y los O.R.N.I.S. unos batracios... De Guatemala a Guatepeor.
Qué dilema chico!

Peque a ti el amor y los productos Bosque Verde te ablandan el corazón y la neurona!
Pero en algo tienes razón, en el cole deberían dar la asignatura de como lavar el corazón sin que te encoja ni te amarillee. La vida sería mucho más fácil.

Dani dijo...

Holaaaaaaaa
Cacho perras, que mucho con eso de que el príncipe azul no existe y que tarari y que tarara. Y que me decís de la princesa azul? Del príncipe azul, al fin y al cabo, todos hemos oído hablar. Por lo tanto, leyenda o no, es posible que en tiempos inmemorables existiese un tío perfecto. Un tío digno de esa calificación, príncipe azul. Pero, mis sultanas, conocéis vosotras leyenda alguna en la que se nombre a la princesa azul? Pues si no la hay será porque jamás la hubo. Es más, no sólo porque jamás la hubo, sino porque jamás hubo mente alguna siquiera de imaginarla.
He dicho.